1.
Al entrar en la venta vio, iluminados por la rojiza llama del hogar ylas amarillentas luces de un velón, los arrieros y mozos de muías quedescansaban en torno de la lumbre, jugando con barajas abarquilladas ysebosas, apurando vasos de vino
2.
Á todos los hispanos dieron lumbre
3.
Como la lumbre en noches del invierno,
4.
Basilio parecía un sol,porque su cara echaba lumbre de satisfacción
5.
—Hemos encendido la lumbre en la casa de la vecina
6.
de sus ojos patiabierta ante el brasero,echando firmas en la lumbre; la veía en el cielo,
7.
Estaluz, luz y lumbre, claridad y ardor, es el amor
8.
visto lumbre en la sala común, y que tal vez estabaardiendo
9.
Quítalo presto de la lumbre
10.
Viendo, pues, el arriero, a la lumbre del candil del ventero, cuál
11.
buena cuenta con su rucio, porque era la lumbre desus ojos
12.
vidapresente, y de la duración de la eterna que se espera, muchos sin lumbre defe, sino con la luz
13.
La lumbre loshiere de
14.
hogar; añade á la lumbre algunos escajos;enciende el candil, y va sacando de la cesta morcilla y media
15.
Después que el estudiante retira del fuego el puchero del guisado paraque el calor de la lumbre le seque á él
16.
establos; los paisanosmascaban las castañas al amor de la lumbre y sólo salían
17.
Empero estos carecen de la lumbre
18.
Hombres, está en ellos señalada la lumbre de Dios—25
19.
[19] Notoria cosa es, á los que tienen lumbre de fé,
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el hogar, en elque ardía una lumbre de boñiga seca, despidiendo
21.
Aquella noche estaban los dos en el mismo cuarto, sentados junto á unaescasa lumbre
22.
y encienden lumbre, y dicen palabras contrael Rey y hablan de levantar bandera
23.
las máscaras y arrimadala lumbre a los rostros, el alguacil Pedro Ronco reconoció a
24.
infamia cubiertas de rojos pintarrajos absorbían la lumbre delponiente y cobraban
25.
¡Buena lumbre, buenacompañía y buena cerveza! Dios
26.
hicieron lumbre con los eslabones para encender sus pipas; peronadie decía una
27.
escuando está en su punto; se retira de la lumbre y se pasa por un paño,esperando que se enfríe para verterla
28.
nochetraer en una lanterna lumbre á la bitácora para que el
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centuplicaba sus fuerzas y ponía en susojos profundos una lumbre de sagrado furor
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resplandor que el dela lumbre de la bitácora; y al encenderla, el
31.
utilidad alguna, hasta queacabó por apagar la lumbre
32.
Un «bona, nit!» o una petición de lumbre para elcigarro
33.
los que habíaalrededor de la lumbre; y el ponerse él, pujando y
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invierno, al amor de la lumbre, y en verano
35.
susperneras a la lumbre; y junto a ella, y acurrucada en el suelo
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había idoobservando alrededor de la lumbre y en los trajines de
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fija en el flamear de la lumbre, cuyo calor buscabapor instinto
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para siempre, el hogar sin lumbre, los establos vacíos, lacasa en
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lumbre; yal ir el Cura a recogerlos, hizo a la gente congregada
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29 & Y luego despues de la afliccion de aquellos dias, el sol se oscurecerá;y la luna no dará su lumbre; y las estrellas caerán del cielo; y las virtudesde los cielos serán conmovidas
41.
29 Y luego despues de la afliccion de aquellos dias, el sol se oscurecerá, yla luna no dará su lumbre, y las estrellas caerán del cielo, y las virtudesde los cielos serán conmovidas
42.
35 Mira pues, si la lumbre que en tí hay, es tinieblas
43.
4 En los cuales el dios de este siglo cegó los entendimientos de losincrédulos, para que no les resplandezca la lumbre del Evangelio de la gloriade Cristo, el cual es la imágen de Dios
44.
24 Y las naciones que hubieren sido salvas andarán en la lumbre de ella: ylos reyes de la tierra traerán su
45.
5 Y allí no habrá mas noche; y no tienen necesidad de lumbre de antorcha, nide lumbre de sol; porque el
46.
29 Y luego dešpues de la afflicion de aquellos dias, el Sol še ešcurecerà: yla Luna no darà šu lumbre: y las eštrellas caeràn del cielo: Y las virtudes delos cielos šeràn commovidas
47.
29 Y luego despues de la afliccion de aquellos dias, el sol se oscurecerá; yla luna no dará su lumbre; y las estrellas caerán del cielo; y las virtudesde los cielos serán conmovidas
48.
pone en un candelero, para que los que entran,vean la lumbre
49.
entran, vean la lumbre
50.
4 en los cuales el dios de este siglo cegó los entendimientos de losincrédulos, para que no les resplandezca la lumbre del Evangelio de la gloriade Cristo, el cual es la imágen de Dios
51.
11 teniendo la claridad de Dios: y su lumbre era semejante á piedra
52.
24 Y las gentes que hubieren sido salvas andarán en la lumbre de ella: y losreyes de la tierra traerán su
53.
5 Y allí no habrá mas noche, y no tienen necesidad de lumbre de candil, nide lumbre de sol: porque el
54.
con migas y buen vino, al amor de la lumbre
55.
Calentaos, ya que sólo puedo ofreceros el techo y la lumbre
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que es un mes, y á este ayunollaman zaziy[25], el cual se hace en un aposento del palacio real sinver lumbre ni tener ayuntamiento
57.
mí un cigarrillo de papel; me ha pedido esos cuartoscomo quien pide lumbre para el cigarro; lo
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casaqueria edificar, que aquel que viera, segun la lumbre que en
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—¡Claro! Está usted tan lejos de la lumbre
60.
Muysensible al frío, se acercaba con frecuencia a la lumbre, la observabacon
61.
enciende lumbre entodo el dia
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vivientes, el secretode todas las familias, la lumbre que calienta todos los hogares, elángel del mundo que
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familia, esta preciosa herencia que lasmadres dejan á sus hijos, esta lumbre apacible que calienta á todos
64.
lumbre, y a Lucía, sentada en el suelo,pareciole más alto que de ordinario
65.
muerto en el acto, abrasado por toda la lumbre y por el
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lumbre formadapor la irradiación del sol, que está detrás
67.
celestiales para esparcirlas enla inmensa bóveda, en la cual poco á poco fueron confundiéndose ámedida que el gigante de la luz hundía su lumbre en los horizontesdel Poniente
68.
Llovía,hacía frío y se refugiaron al lado de la lumbre
69.
Kitiara prefería dormir en su improvisado cuarto del sobrado, aunque estaba lejos de la lumbre
70.
Fuego de lumbre en una chimenea
71.
La débil penumbra a su alrededor se tiñó con la cálida luz de la lumbre
72.
La lumbre áurea de todas aquellas luces ardientes le dilató las pupilas y una rara lucidez penetró en su mente
73.
Así que Gaetano hubo transmitido esta respuesta, dio una orden el centinela a uno de los hombres que estaban sentados a la lumbre, el cual se levantó acto seguido y desapareció entre las rocas
74.
De repente, el hombre que se había separado de la lumbre apareció, en opuesta dirección, haciendo con la cabeza una señal al centinela, que volviéndose hacia el barco se contentó con pronunciar estas palabras:
75.
Desde que puso el pie en tierra, desde que se dio cuenta de las disposiciones, si no amistosas, indiferentes de sus huéspedes, desapareció toda su desconfianza, cambiándose en apetito con el olor de la cabra que asaban en la cercana lumbre
76.
En su interior se sentía un fuerte olor a humo rancio y en la chimenea ardía sólo una vacilante lumbre, así es que Poirot se dirigió de puntillas hasta la puerta del fondo señalada con el letrero de «Sólo para huéspedes»
77.
la lumbre en el hogar
78.
El capitán de armas inclinó la cabeza, farfulló algunas palabras y se fue con el armenio, cuyos ojos echaban lumbre
79.
Encendieron lumbre, y se pusieron a cocer el volátil más craso, para preparar una buena sopa al pobre enfermo
80.
Los náufragos se habían inclinado delante de la lumbre para enjugarse los vestidos, que les chorreaban
81.
—Pero vuestra hazaña es para explicarla, al amor de la lumbre, a las generaciones venideras; en cambio lo mío es miserable
82.
Los tres se pusieron a glosar los avatares de aquella jornada ocurrida hacía ya cinco años, hasta que el ambiente fue distendiéndose a la lumbre del diálogo y del generoso licor que un criado escanció en las copas que sobre un velador y ante sí tenían los tres interlocutores
83.
Andaba salida, en el lugar había pocas oportunidades y los hombres escaseaban, cuando un día compareció por aquellos pagos el hombre más gallardo que haya podido parir madre de entre todos los que yo hubiera podido ver desde que mi padre me hacía ir con él a las ferias; era un soldado de las compañías mercenarias de Bertrán de Duguesclin que había alquilado su fierro al anterior rey Enrique II, que por cierto obligaba a sus súbditos a alojar a la soldadesca en sus haciendas bajo fuertes penas y a darles aceite, pan y un lugar en la lumbre
84.
—Los climas son los que condicionan el carácter de las gentes, señora, el invierno en Toledo es crudo e invita a resguardarse en el interior de las casas y arrimarse al amor de la lumbre; en cambio aquí es templado y durante medio año las gentes hacen vida en las calles
85.
El brujo se apoyó en los codos, acercó el libro a la lumbre
86.
Los viejos cantaban unas canciones súper tristes que te partían el alma, los jóvenes daban palmas, y las mujeres bailaban alrededor de la lumbre
87.
Mira cómo rodean a la abuela, que ya ha puesto el puchero a la lumbre
88.
Entonces la esposa del walí la mandó desnudar, y le quitó los buenos trajes de seda y las alhajas, y le puso encima del cuerpo una mala y vieja falda de pelo de cabra, y la mandó a la cocina: diciendo: "¡En adelante, tus funciones de esclava en esta casa consistirán en pelar cebollas, poner las cazuelas a la lumbre, exprimir el jugo de los tomates y hacer la masa para el pan!"
89.
Y después de comer, el moghrabín cogió la caña hueca, las tabletas de cornalina roja, el braserillo con lumbre y el incienso; y antes de comenzar las fumigaciones mágicas, dijo a Juder: "¡Oh Juder, tengo que hacerte una recomendación!"
90.
A [38] ratos, avivada la lumbre por una racha de viento, alumbraba con siniestro resplandor la plaza y calles circundantes, enrojeciendo las fachadas de las viviendas y las caras de los soldados
91.
Lo más extraño de todo es que en la [125] frigidísima estancia no había lumbre
92.
Oyendo esto, mi suegro echaba lumbre por los ojos, señal de la conformidad de sus ideas con las que expresaba D
93.
Arrebató Teresa de las manos puercas de Tuste las dos lechugas; sacó de su bolsillo el poco dinero que le quedaba; dio una parte a la mujer, otra al hombre sucio, diciéndole: «Corra usted a la tienda y traiga lo más preciso para que coman hoy; traiga carbón, encienda lumbre
94.
Ya no pensaba más que en despertar a la muchacha, sacándola a tirones de su camastro, y en encender lumbre
95.
Las raciones de galleta húmeda amenguaban de la mañana a la tarde, y los cocineros anunciaban la terminación de toda [145] comida caliente por las dificultades de encender lumbre y de encontrar combustible en aquellos pantanos
96.
"Se volvió hacia la lumbre
97.
Al llegar a este punto estaba yo medio loco; las sienes me latían, mis orejas echaban lumbre, el corazón se me quería saltar del pecho
